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La ofensiva militar de Israel contra Palestina avanza en medio de un bloqueo que tiene a lxs palestinxs sin suministro de agua, luz ni alimentos; desde el 8 de octubre los bombardeos dejan más de 5.087 personas fallecidas, de estas víctimas 2.055 son niñxs y 1.119 son mujeres, según el Ministerio de Salud de Gaza.
Por su parte, el grupo militante palestino Hamás retiene a más de 200 personas y su incursión en el territorio ocupado de Palestina deja 1.400 personas fallecidas, según datos del gobierno israelí.
La violencia que atraviesan las mujeres en el genocidio contra Palestina
En conflictos armados AUMENTAN los riesgos para niñxs y mujeres de ser víctimas de violencias basadas en género, pues quienes se deberían encargar de proteger y denunciar, como las personas cuidadoras, autoridades especializadas, escuelas, entre otras, se ven afectadas en sus funciones mientras atienden la emergencia.
En estas circunstancias, además, aumenta la carga de trabajo no remunerado que recae, generalmente, sobre las mujeres. Esto en situaciones de emergencia implica no solo la atención del entorno inmediato, sino del colectivo afectado. De esta manera, también se agudizan las desigualdades estructurales.
Una mirada particular de la situación de niñas y mujeres en Palestina es indispensable, pues este territorio está siendo víctima de una ofensiva desproporcional que deja miles de civiles en situaciones de precariedad y absoluta vulnerabilidad.
La historia de segregación, opresión, discriminación y violencia sistemática que ha vivido la población Palestina, hace que esta sea una de las regiones del mundo en las que se registran mayor número de violaciones de los derechos humanos.
“Desde la perspectiva de la agenda sobre mujeres, paz y seguridad, son innegables los numerosos e ingentes retos que persisten en Palestina si se tiene en cuenta la realidad crónica de violencias múltiples que afrontan las mujeres y niñas palestinas en su vida cotidiana como resultado de las políticas de ocupación israelí –violencia indiscriminada, segregación, discriminación, régimen de apartheid, vulneraciones sistemáticas de derechos humanos y del derecho internacional humanitario, entre otras prácticas– que determinan impactos directos e indirectos, desproporcionados y específicos en las mujeres palestinas, condicionados también por el contexto patriarcal.” (Mujeres, paz y seguridad: aplicación, retos y límites en Palestina)
La poetisa y novelista feminista palestina Heba Abu Nada, autora de la novela El oxígeno no es para los muertos, murió el 20 de octubre en Gaza, en medio de los ataques de Israel a Palestina. Tenía 32 años y, además de escritora era bioquímica y nutricionista.
“Si morimos, sepan que estamos satisfechos y firmes, y digan al mundo, en nuestro nombre, que somos personas justas/del lado de la verdad”, escribió un día antes de ser asesinada. Ese mismo día publicó su último poema:
“La noche en la ciudad es oscura, excepto por el brillo de los misiles; silenciosa, excepto por el sonido del bombardeo; aterradora, excepto por la promesa tranquilizadora de la oración; negra, excepto por la luz de los mártires. Buenas noches”.
Mujeres israelíes y palestinas por la paz
Previo al ataque de Hamás, mujeres del movimiento israelí Women Wage Peace y de la asociación palestina Women of the Sun, se unieron para exigir la paz.
“Nosotras, las madres palestinas e israelíes, estamos decididas a detener el ciclo de derramamiento de sangre y cambiar la realidad del difícil conflicto entre los pueblos por el bien del futuro de nuestros hijos”.
https://www.jpost.com/israel-news/article-761604 (tomar solo la imagen de apoyo de aquí)
CENSURA POLÍTICA Y LITERARIA
La Feria Internacional del Libro de Frankfurt suspendió la entrega del Premio LiBeraturpreis a la escritora palestina Adania Shibli,“en plena solidaridad” con Israel.
Más de 600 escritores, incluidas las premio Nobel de Literatura Annie Ernaux y Olga Tokarczuk, así como la colombiana Pilar Quintana y la canadiense Madeleine Thien, ganadoras del mismo premio, pidieron a la Feria revocar esa decisión y dar espacio a las voces palestinas.
SilenciadAs
Mujeres reconocidas en el mundo del espectáculo y la cultura han sido castigadas por hablar sobre este asunto y denunciar el genocidio en Palestina. Es el caso de la actriz porno Mia Kahalifa, que fue despedida de PlayBoy tras pronunciarse a favor de Palestina en la red social X https://x.com/HardewumyJ/status/1711604530830278701?s=20.
También ocurrió con Gigi Hadid, de ascendencias palestina, mencionada por la cuenta oficial del Estado de Israel por sus posturas a favor del pueblo palestino y en contra de los ataques. Ella y su hermana Bella han recibido amenazas de muerte después del señalamiento.
¡NO EN MI NOMBRE!
Cada vez son más las mujeres judías o de ascendencia judía que se pronuncian sobre lo que está ocurriendo, desligándose de la ofensiva desproporcionada del Estado de Israel. “No en mi nombre, no en nuestro nombre” es la consigna que se repite, haciendo alusión al genocidio que se está cometiendo en nombre y bajo la bandera de Israel. Piden que cesen los ataques y hacen un llamado a la paz.
EL GENOCIDIO ES PATRIARCAL
Si bien es obligatorio para las mujeres en Israel prestar servicio militar, esto no responde a lógicas feministas, responde a lógicas patriarcales. La guerra y el genocidio son las mayores expresiones patriarcales. La única apuesta feminista posible es la paz.
