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Fotos por: Victoria Holguín.
Este 21 de febrero las colombianas nos reunimos una vez más para celebrar otro año, el segundo de la mayor conquista en términos de derechos de las mujeres de la última década: el aborto libre hasta la semana 24 de gestación. Un logro resultado del trabajo colectivo, del acumulado político de décadas y de la firmeza, obstinación o terquedad de las pioneras, lideresas e integrantes del movimiento Causa Justa, que insistieron hasta el último minuto de esos 523 días de espera desde que presentaron ante la Corte Constitucional la demanda para eliminar el delito de aborto del Código Penal, resistiendo a todas las adversidades posibles e imaginables, hasta conseguir lo que a muchos y muchas les parecía imposible, que la corte eliminara el delito de aborto hasta la semana 24.
Desde ese día, todas las manos que trabajaron para materializar la Sentencia C-055 del 2022, o sentencia Causa Justa, no han parado de trabajar para defenderla y protegerla. Esas mismas manos, las de las voceras de las organizaciones que escribieron la demanda, las de las feministas más jóvenes que salieron a las calles a levantar sus pañuelos tantas veces frente a la corte, las de las músicas que prestaron sus letras para acompañar las jornadas, las de Zaira, la intérprete de señas que interpretó desde los manifiestos hasta el perreo feminista se volvieron a juntar, esta vez para tejer el mayor pañuelo que se haya tejido en Colombia. Un pañuelo de 20 metros, símbolo del tejido, la unión y la fuerza de este movimiento que sigue desplegándose cada vez que se hace necesario para cobijar la sentencia y a todas las mujeres, hombres trans, personas no binarias que eligen abortar y a las acompañantes y prestadores del servicio que practican abortos. Estos fueron algunos de los rostros que acompañaron esas manos.
