El equipo de fútbol y aficionados al que el Estado intenta hacer a un lado
Proceso fue uno de los poquitísimos medios que dieron espacio al testimonio de Carlos Adame Flores, “El Pañañas”, aficionado y porrista del equipo de fútbol Los Avispones, “víctimas excluidas del Caso Ayotzinapa”, como describió la periodista Vania Pigeonutt.
La noche del 26 de septiembre de 2014, Los Avispones salieron de Chilpancingo con destino a un partido en Iguala. Una vez terminado el evento, el plan era ir a cenar para celebrar, pero pasadas las 23:00 hrs, el entrenador, Pedro Salado, recibió un aviso de que en la ciudad de Iguala había un mitin de los estudiantes de Ayotzinapa y una balacera. El chofer (Víctor Manuel Lugo) tomó la carretera federal hacia Chilpancingo y a la altura del crucero de Santa Teresa, a 12 kilómetros de Iguala, comenzaron los disparos contra el camión, perteneciente a la empresa Castro Tours, en el que iban a bordo.
Según contó El Pañañas a Proceso, en 10 minutos, el vehículo de Los Avispones recibió al menos 100 balazos. Esto ocasionó que el chofer, que fue el primero en recibir los impactos de bala, perdiera el control y el camión cayera a una zanja, dejando atrapados a los 32 pasajeros.
El ataque provocó el fallecimiento de Miguel Lugo y David Josué García Evangelista “Zurdito”, jugador de Los Avispones y joven de 15 años. Además, dejó 16 personas heridas, entre ellas El Pañañas y Pedro Rentería Lujano, director del equipo, quien contó que, heridos, estuvieron atrapados en el camión poco más de dos horas. Rentería Lujano ha platicado que pidieron ayuda a policías federales y caminos, pero se negaron a auxiliarlos.
A principios de marzo de 2016, Aristegui Noticias tuvo acceso a una carta firmada por “padres de jugadores y cuerpo técnico” del equipo en la que se brindaron más detalles de la noche-madrugada del 26 y 27 de septiembre de 2014. En dicha carta enviada a la diputada María Guadalupe Murguía Gutiérrez se relató que policías federales detuvieron a Los Avispones 20 minutos antes del ataque. También se reiteró la negación de ayuda por parte de los uniformados y se hizo mención del batallón de Iguala que, presuntamente, sólo los maltrató y amenazó.
En octubre de 2019, la madre de David Josué García Evangelista, Roberta, contó a Pie de Página que las víctimas de Los Avispones no están incluidas en la comisión de la verdad para la resolución del Caso Ayotzinapa y que, hasta entonces, no había habido un acercamiento por parte del gobierno federal, esto a pesar de que en marzo de 2018 la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolvió un amparo a favor de siete jugadores de los Avispones.